Hoy Maite nos enseñó a medir el aire de nuestros pulmones. Ahora os diremos cómo se hace:
- Coges botellas de varios tamaños. Piensas a cuál de ellas se parecerán tus pulmones.
- Llenas de agua la botella que has escogido.
- Coge un recipiente grande (un cubo, un barreñón...) y llénalo de agua.
- Tapas con la mano la boca de la botella y, sin que se te caiga nada, le das la vuelta y la metes en el recipiente con agua boca abajo (un poco metida en el agua). Ya verás cómo el agua de tu botella no se sale.
- Coge un tubo de plástico o de goma y lo metes por la boca de la botella.
- Coge mucho aire, todo el que puedas.
- Sopla hasta que te quedes sin aire.
¿Llenaste de aire toda la botella?
¿Acertaste en el tamaño de tus pulmones?
En las fotos de arriba habéis visto a Jorge probando si tenía un litro y medio de aire en sus pulmones. Y sí que lo tenía.
En las de abajo veréis a Bryan probando con un litro. Casi lo consiguió.
Eva, apunta para cuando tus peques sean mayores.
Feli, gracias por escribirnos. De parte de todos, besos. Te queremos mucho.